lunes, 31 de agosto de 2009

España 93 Israel 56: recordando a Isaac Bashevis Singer



España ha ganado a Israel en el Palacio de Deportes de Murcia, “con solvencia” como se dice invariablemente al finalizar cada partido de la mejor selección española de baloncesto de todos los tiempos. Losquenoentendemosdebaloncesto hemos vibrado con el partido y nos hemos emocionado al contemplar los graderíos del Palacio rebosantes de aficionados. Y mientras soñábamos con una Copa de Europa extraordinaria para nuestra selección ( “el oro está en Polonia”) hemos recordado que en el anterior partido de España con Israel, celebrado hace escasos días en Zaragoza, la policía impidió el paso a personas que portaban banderas palestinas. Alguien pensará que vamos a escribir ahora un panfleto radicalmente antisionista, nada más lejos de nuestras intenciones. En esto, como en ningún asunto más, coincidimos con Mario Vargas Llosa y pensamos que no se puede arrojar al mar a nadie, y que ambos pueblos deberán convivir en un futuro en las torturadas tierras del Mediterráneo Oriental. La llegada de la selección israelí a tierras murcianas nos ha hecho recordar a un escritor en lengua yiddish poco conocido a pesar de ser Premio Nobel de Literatura. Se trata de Isaac B. Singer. Nos impresionó la primera lectura de una obra suya, “Los Desheredados”, luego leímos “Un amigo de Kafka”, “La familia Moskat” y con “Escoria” lo abandonamos hasta ahora (queremos releer “Los desheredados” que ha aparecido en el trastero de la casa de nuestros padres). ¿Y qué podemos decir de la literatura de Singer?: en nuestro caso nos cambió la visión sesgada que teníamos sobre los judíos y conocimos a un pueblo que durante 2000 años sólo había recibido bofetadas, insultos, expulsiones y progromos. Claro que hablamos de los judíos de Centroeuropa que hablaban el yiddish, “la lengua que tiene más palabras para definir a un pobre” como dijo el propio Singer.
Viendo a la selección israelí y escuchando los comentarios de los locutores de La Sexta, en nuestra opinión frívolos y carentes de gracia alguna, recordamos a Singer y los hermosos momentos que habíamos pasado leyendo con fruición “Los desheredados”, literatura con mayúscula que acerca a los pueblos y los hace más tolerantes. Y desde losquenoentendemosdebaloncesto invitamos a su lectura porque no todo es baloncesto y seguro que emocionará más los cuentos de “Un amigo de Kafka” que el partido realizado por Israel a orillas del río Segura.

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