martes, 11 de enero de 2011

Adiós


Ayer recibí un texto de Eduardo Galeano enviado por un buen amigo. Dice así:


Deseos para este nuevo año

Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza.

Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.

Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.

Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.

Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.

Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo”.

Eduardo Galeano



Galeano es para mi un autor de culto desde que leí Las venas abiertas de América Latina, allá por los últimos ochenta, y lo seguirá siendo hasta que el último aliento abandone mi cuerpo. Espero que ese momento se atrase lo máximo posible.

Pero lo que si ha exhalado el último aliento es este blog, losquenoentedemosdebaloncesto, acaso de muerte natural, tal vez de desesperanza. No es que ya no crea en el baloncesto, no; casi con toda certeza, debo consultarlo con filósofos y pastores de la vida, he perdido la fe en mi misma.

El próximo día 15 de enero, coincidiendo con el cumpleaños del padre que perdí en el último tórrido estío, este blog se disipará, como la aurora boreal en los bosques de coníferas, en la Nube. Espero que quede algún rastro en este mundo virtual, algún recuerdo dulce...

Gracias, amigos y amigas por vuestra paciencia.

Hasta siempre.


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