domingo, 23 de mayo de 2010

Desconocemos hasta dónde llegan las olas...


Desconocemos hasta dónde llegan las olas de este blog. Acaso la arena mojada y la blanca espuma se depositen en los álamos del júcar o en la boca del metro de la Puerta del Sol; tal vez el aroma del Mar Menor, de los peces diminutos y de las chapinas en la transparencia acuosa de mayo, lleguen al puerto de Barcelona o a la piedra vegetal de la Sagrada Familia (no sería extraño: allí, en esa ciudad hermosa y libre de Rusiñol, de Gaudí, del noucentismo, de Teresa y de la vida misma residió durante pocas semanas Eloy Sotelo). Es posible que también se acerque a Cartagena en suaves ondas de color y luz. Mientras paseamos por las calles de una ciudad que ha descubiertos sus entrañas de piedra alineada, no podemos sino pensar en los cartagineses, en los romanos, en el Teatro Romano, en el Molinete de Juan Goytisolo y en el arquitecto Victor Beltrí, que nos obsequió con bellezas modernistas ancladas a una tierra de historias gloriosas y desengaños milenarios. El Gran Hotel, El Palacio Aguirre, La Casa Cervantes... y mirando el mar, ese sol que bruñe el reflejo de los dioses en sus serenas aguas y sus colinas, que protegen la vida interior de la bahía.

Por esa ciudad mediterránea en el sentido clásico de la palabra, paseó Eloy Sotelo su amor, todavía presente en cada poro de su piel. Atravesó las llanuras del Mar Menor, entre palmeras y molinos, Dejó a su izquierda las oscuras sierras de La Unión mientras navegaba por las plácidas aguas de una pasión que pervivió en el horror de Leningrado. Cerca de Cartagena, quisó plasmar su felicidad en unas cuartillas, y se sentó mirando la vida de frente, con el sol reflejando su corazón en las nubes de algodón del fondo del mar. Allí permaneció horas enteras, en las hechuras del Cabezo Beaza, tal vez en el mismo sitio que ahora se levanta el pabellón deportivo, sede de las finales a cuatro infantil masculina. La final a cuatro femenina se está jugando también en Cartagena, en este caso en el pabellón Urban.

Por desgracia, el club de nuestra hija, el AD Infante femenino perdió la semifinal con el Jairis, pero ahí estamos de nuevo en una fase final, apostando como siempre por el baloncesto femenino tan abandonado a los vaivenes de la diosa fortuna. Jugarán la final el CB Cartagena y el Jairis de Alcantarilla Por su parte, en categoría infantil masculina el CB Murcia y el CB Capuchinos jugarán la final al ganar respectivamente al ADM Molina y al CB Cartagena.

Cuando se levantó de la tierra dura y espinosa, Eloy Sotelo leyó al viento "el amor que me envuelve", acaso uno de sus mejores poemas de métrica libre, merecedor de aparecer con honor en cualquier antología de la mejor poesía castellana del Siglo XX. Todavía hoy, Irene Andreo, la madre de Lucía Sánchez, se emociona cuando, sentada en la mecedora de luz torrentosa de su hogar, se lo lee a sus nietos. ¡Cómo pudo existir un amor como aquél en tiempos de hierro y sangre!.

4 comentarios:

Anonymous dijo...

Te echo de menos....Lloranda Gay.

Anonymous dijo...

Ay, Lucía, leyendo tu texto me volaba mi imaginación a las playas del Mar Menor, donde mi abuelo, quizás amigo del tuyo, paseaba por sus orillas.
Aquellos tiempos, mejores que los actuales por pasados y por su tranquila intranquilidad, eran tiempos sin prisa, sin agobios, sin gentes.
Tiempos en los que los hombres se saludaban por el simple hecho de cruzarse por la acera y al pasar junto a una mujer, una señora, se quitaban el sombrero como señal de respeto.
Momentos en los que la poesía parecía ser el lenguaje común al hablar y actuar y se destilara buen gusto, señorío y saber estar.
Por supuesto que siempre hubo, hay y habrá excepciones pero ni siquiera serán para confirmar una regla, una norma escrita o no.
Tu abuelo, el mío, el de otros padres y madres como nosotros tuvieron la suerte de vivir aquellos tiempos y de ver el Mar Menor como lo que aún es aunque quieran arrebatarlo a base de puerto deportivos, motos de agua y demás caprichos de pijos, digo, aún es un paraíso, si, un PARAÍSO en el que cuando estás allí, con poco que te fijes, escucharás la voz y el sentir de Eloy diciendo: "... el amor que me envuelve..."

simeon dijo...

Mi madre me contaba que a mediados de Julio, mi abuelo cogia el carro con sus yeguas, su mujer y sus siete hijos y se iba a montar el chiringuito en Los Alcazares, en el carril de las Palmeras, creo recordar, justo en una calle que baja hacia la playa al final Los Alcazares y que para los mas jovenes podemos decir que a unos 300/400m mirando al mar a la izquierda de donde se juega el 3x3 de esta villa. Precisamente el año pasado me acordé, ya que comimos en una pizzeria casi pegada a esa calle de las palmeras.
Esta época fué antes de la guerra civil española, y también algunos años después, por lo que tal vez mis abuelos conocieran a Eloy, miraré en las cosas antiguas de mi familia para ver si encuentro algo relacionado con Eloy "el guatemalteco".
Lloranda, me gustaría como ál anónimo anterior, que cada vez que Lucia Sánchez nos alegre la vida con sus temas, que tú nos la alegres con tus comentarios.
Un beso a las dos.
Y perdonad que yo no sepa escribir; escribo como hablo.

Simeón dijo...

El CB Murcia 94 gana de 40 puntos a su rival de Castilla la Mancha (79-39) en el intersector Cadete de Mazarron.
Para empezar está fenomenal, mañana el Madrid, y nuestro partido, donde nos jugaremos el ser o no ser el sábado frente al Valencia.
Ánimo chicos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Besos Lucia