viernes, 12 de noviembre de 2010

Buscamos la luz en la palabra...


Buscamos la luz en la palabra, ese parpadeo de oro en el fondo de la letra, en el ángulo de 90º grados de la L y solo hallamos soledad, olvido, oscura ausencia. Luego nos encaramamos al descansillo de la F, antes de conquistar la cima y contemplar entre nubes blancas y alargadas el inmenso mar hablándonos a borbotones de sal. Desconocemos nuestro destino, si es que acaso lo tenemos, desconocemos si el vuelo futuro nos hará crecer las alas de algodón o caeremos heridas, con los brazos cercenados, en la profunda sima del desconcierto. No lo sabemos, nadie lo sabe.

Buscamos la verdad en la palabra, nos deslizamos por los toboganes de la V, subimos y bajamos, somos y fuimos, pero la tenue certeza que nos haría serenar el corazón se nos oculta detrás del hilo de seda, de las hojas de las moreras en primavera, tiernas, verdes, olorosas. Tal vez podamos podar los árboles, desnudarlos hasta provocar rojez en sus tristes ramas pero nunca nos mirarán con compasión, hemos destruido tanto y con tanta saña que ya la naturaleza nos vuelve insolente la espalda.

Noviembre es un mes largo, vacío, sin un puente en el que descansar y contemplar los días borrados del calendario por las luces y las sombras, los vientos y la quietud de los árboles. El día se desvanece poco después de las seis de la tarde, la luz artificial proyecta sus brillos sobre las pistas descubiertas de baloncesto mientras nuestras hijas juegan, ríen, atienden las explicaciones de sus entrenadoras y sueñan con viajes a la nieve o con la llegada de un nuevo estío vestido de arena y oleaje.

La hojarasca es el olvido. Mientras tanto el tiempo envuelve en un capullo de silencio nuestras perdidas ilusiones.

3 comentarios:

Anonymous dijo...

¡Hola Lucia!
Eres """mágica""".
Un beso

Anonymous dijo...

Ay Lucía, con cada entrada que realizas me enamoro más de tí. Me encantaría conocerte,...supongo que nunca me darás esa oportunidad.

Saludos

Un admirador

Anonymous dijo...

Al anónimo anterior.
Puedo presumir de conocer a Lucia y he de decirte que para verla, tan solo imagina la belleza magnificada para tí tanto exterior como interior, esa belleza de persona es Lucía.
PD: Grcs por la dedicatoria.
Un beso, Lucía.