Por los barrancos y
sembrados de Polonia y Ucrania corrió en abundancia sangre semita.
También corrió sangre y hambre ucrania y polaca, huesos apilados y
piel adherida a la sequedad de la tierra.
Eso ya no importa.
Ucrania y Polonia son países europeos, como cualquiera de las
decenas de países europeos donde corrió la sangre, reventó el
campanario de la catedral o se pudrió la carne debajo de toneladas
de escombros y tanques transitando por las ruinas.
La guerra ya es solo una
imagen borrosa de un pasado olvidado, la guerra y sus posibilidades
de crueldad humana. No obstante, cuando en el pasado se vertían a
las aguas de los ríos millones de litros de leche o se quemaban los
excedentes agrícolas para evitar el hundimiento de los precios, en
otros lugares, allende los mares y los océanos, la piel de los niños
seguía pegándose a los huesos como calcamonías de estrellas del
fútbol y la gente yacía debajo de los escombros de un cielo azul
sin bombarderos rasgando sus leves nubes de algodón.
La guerra y la
injusticia, la economía y la miseria....
2 comentarios:
Vista la batalla campal tras el partido Polonia-Rusia entre los hinchas de sendos equipos, no queda tan lejana la guerra. Se supone que esos 90 minutos son para despejar el cielo de Europa, permitiendo que podamos ver el sol. Hay heridas que el tiempo no cura... Bienaventurados los que olvidan ¿o no? Nunca entendí a Nietzsche.
Aquí en nuestro mundillo del baloncesto "NADIE OLVIDA" y jiji-jaja, pero sin olvidar. Y las putadas recibidas, en cuanto se puedan devolver, a devolverlas. JIJI-JAJA.
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